Durante el pasado fin de semana, un uruguayo se hizo pasar por empleado de una multinacional petrolera y logró ganarse la confianza de dos hombres en Medellín, para posteriormente llevarlos a una finca alquilada y hurtarles sus pertenencias mediante el suministro de escopolamina.
El engaño comenzó en un establecimiento nocturno de la ciudad, donde el extranjero entabló conversación con las víctimas. Una de ellas relató: “mi amigo conoció a esta persona y se mostró muy amable, formal y todo eso”.
Después de ganarse la confianza de los dos hombres, el uruguayo los invitó a una finca alquilada, donde les administró escopolamina para dejarlos inconscientes y proceder con el robo de sus pertenencias. Las víctimas, al despertar, se dieron cuenta del hurto y denunciaron el incidente a las autoridades.
La policía de Medellín ha iniciado una investigación para capturar al responsable y recuperar las pertenencias de las víctimas. Este caso destaca la importancia de estar alerta y ser cauteloso con las personas desconocidas, especialmente en situaciones sociales como bares y clubes nocturnos.
Las autoridades recomiendan a la comunidad tomar precauciones y no confiar ciegamente en extraños, independientemente de su apariencia o conducta inicial, para evitar ser víctimas de delitos similares.
